¡Jo, Presidente, es que últimamente no das ni una!
El Presidente del Gobierno ha prometido en Jaén que va a conceder ayudas al sector agroalimentario y ganadero, en concreto en Andalucía y Extremadura ha prometido bajar el número de jornadas necesarias para cobrar el subsidio de desempleo.
Esta medida sin duda alegrará a los obreros que trabajan en el campo extremeño y andaluz. Pero a los agricultores y ganaderos de ambas regiones, lo que la medida va a suponer es una menor disposición de mano de obra necesaria para las faenas en el campo y por lo tanto más perdidas en este sector.
Si a los problemas de sequía, de aranceles, de bajos precios, agravamos el problema de mano de obra, el resultado va a ser de un abandono de los cultivos que necesitan mano de obra para su recolección y manejo.
El Presidente ha vuelto a errar en la definición del destino de sus ayudas, si el error de llamar jamón serrano a ibérico, se pudiera perdonar, por ser eso precisamente un error, el dificultar las faenas del campo con menor disposición de mano de obra para los agricultores y ganaderos y decir que es una ayuda a los mismos, no se puede considerar un error, es querer beneficiar a tus posibles votantes, los obreros, en detrimento de los que no consideras votantes tuyos, agricultores y ganaderos.
Esta campaña se han arrancado más de 2.000 has de ciruelos debido a diversas circunstancias entre la que se encuentra la escasez de mano de obra, si desde el Gobierno se sigue aumentando de manera drástica el salario mínimo interprofesional, que ha repercutido en una subida salarial en el capo extremeño del 24% y se siguen bajando el número de jornales para cobrar los subsidios, que nadie tenga dudas de que se seguirán abandonando cultivos sociales en detrimento de cultivos mecanizables.
Lógicamente si un obrador del campo extremeño y andaluz, con 15 jornadas trabajadas va a cobrar los subsidios, que a nadie le extrañe que no vaya a trabajar más de esos días al año, total ¿para qué?
