Tras el cierre de bares y restaurantes por el Estado de Alarma, hay ciertas producciones que se han suspendido su comercialización y otras muchas se han ralentizado. Al mismo tiempo hay que tener en cuenta que es estas fechas en España teníamos actualmente casi tres millones de turistas que lógicamente comían todos los días y que en estos momentos se encuentran en sus países de origen y no consumen productos españoles ni extremeños.
Se han suspendido los contratos de compra de leche de oveja y cabra para la elaboración de quesos, los corderos están aumentando de peso por lo que son va a ser posible su comercialización, los terneros no se venden y cada día que hay que alimentarlos el ganadero pierde el valor de su mantenimiento, y así podíamos seguir con la totalidad de las producciones que tenemos actualmente y que la tragedia nos vendrá cuando los cultivos empiecen su recolección,
Si en España se esperan anualmente 80 millones de turistas y este año se puede caer a la mitad esta presencia, tendremos que llevar estos productos alimentarios a sus lugares de residencia.
Se ha solicitado al Ministerio una serie de medidas para evitar la ruina de las explotaciones agrarias, empezando en estos momentos por las ganaderas y haciendo previsiones para las agrícolas en pocas fechas.
Hay que empezar a almacenar y congelar carnes, hay que conceder ayudas de mínimis a los productores para que puedan mantener las explotaciones, y sobre todo hay que buscar los mercados alternativos, si los turistas no van a comer en España, tendremos que llevar los alimentos a Reino Unido, Alemania, Francia, etc.
No vemos previsión de que se estén realizando estas gestiones con la intendencia de estos países y nos parece que tanto el Gobierno de la Nación, como el Gobierno Regional están improvisando cada día y no existe un plan para hacer frente al desastre que se nos avecina,
La Unión Extremadura recuerda a las industrias que tienen firmados los contratos de compra-venta, que hay que respetar estos contratos y no se pueden suspender la recogida de productos por falta de comercialización, tendrán que ser estas industrias transformadoras las que tendrán que negociar con el Ministerio y la Consejería el almacenamiento de los excedentes. En caso contrario tendríamos que denunciar ante el Aica el incumplimiento de los contratos de compra-venta.